MALTA SIEMPRE

Nuestra alumna Marta Carrascosa volvió para irse de nuevo. Su experiencia resultó tan exitosa que se vuelve de nuevo a trabajar allí. ¡Enhorabuena!
Estos son su recuerdos:

 Marta Carrascosa Villar 

 No sabría explicar el motivo por el que decidí irme de Erasmus, supongo que tenia la necesidad de salir de mi zona de confort y emprender nuevas aventuras. Sin ninguna duda puedo decir que era justo lo que necesitaba. 

Recuerdo que cuando llegue a Malta estaba asustadísima pero poco a poco fui habituándome, encontrar un piso, el primer día de prácticas y los primeros amigos. Poco a poco lo de vivir en esta pequeña isla se convirtió en una rutina que me encantaba y me di cuenta de que era más independiente de lo que pensaba. Empece a tener amigos que parecía que los conociera de toda la vida aunque solo nos conociéramos de un mes. Haces planes que antes no se te habrían pasado por la cabeza como por ejemplo quedar para hacer la compra semanal o para salir un lunes. 

Conocí a un montón de gente de diferentes nacionalidades y esto me ayudo con el principal objetivo de esta aventura, APRENDER INGLÉS. También puedo decir que no pude tener más suerte con mi empresa de prácticas, me dieron la oportunidad de aprender y se convirtieron en mi familia durante estos 3 meses. 

Solo puedo decir que hay una cosa negativa en esta experiencia y es que se acaba. Que en el ultimo mes la depresión post-Erasmus aparece y comienzan las despedidas de esa gente que hace 3 meses eran desconocidos. 

Un Erasmus te cambia, te ayuda a conocerte a ti mismo y a saber hasta donde puedes llegar sin ayuda de nadie, por eso recomiendo a todo el mundo que pueda vivir esta experiencia que no se lo piense porque es una de las aventuras más increíbles que va a vivir en su vida.